jueves, 6 de noviembre de 2008
elegancia acesa
Puiden ser espectador e aprezar ese xeito. Sentarse na butaca e observar a interpretación privilexiada a pesares da intranscendencia da historia e as limitacións da separata. Non era o mellor ambiente e material para reiventarse pero hai actrices que sempre iluminan por si mesmas a escuridade do escenario. Con vigor, ritmo, honestidade e elegancia...elegancia para marcar a posición as miradas e os pasos de zapatos vermellos. Debe ser esa etiqueta que non se prodiga pero mitifica as dramaturxias, algo así como "a gran dama da escena..." que encabeza carteis co prestixio adquirido e a madurez necesaria. Era María Barcala, Teatro do Atlántico, coa obra A bombilla máxica.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Archivo del blog
- marzo (1)
- febrero (1)
- abril (1)
- marzo (1)
- febrero (1)
- noviembre (1)
- febrero (1)
- noviembre (1)
- marzo (1)
- febrero (1)
- octubre (1)
- agosto (1)
- junio (1)
- enero (1)
- noviembre (1)
- septiembre (1)
- junio (1)
- mayo (1)
- marzo (1)
- febrero (1)
- diciembre (1)
- noviembre (2)
- octubre (1)
- septiembre (1)
- julio (1)
- junio (3)
- mayo (2)
- marzo (1)
- febrero (2)
- diciembre (1)
- noviembre (1)
- octubre (1)
- septiembre (2)
- agosto (1)
- julio (1)
- junio (2)
- mayo (2)
- abril (2)
- marzo (3)
- enero (2)
- diciembre (4)
- noviembre (2)
- octubre (2)
- septiembre (1)
- agosto (2)
- julio (7)
- junio (5)
- mayo (9)